MADRID, (EUROPA PRESS) – Líderes internacionales expresaron su preocupación por las crecientes consecuencias del cambio climático en todo el mundo y que afectan en particular a los más vulnerables y han urgido a los países reunidos en la XXVIII Cumbre del Clima de la ONU que se celebra en Dubai (Emiratos Árabes Unidos) a acelerar la acción y eliminar la brecha existente en la realidad y las promesas de mitigación, adaptación y financiación.
El rey Carlos III del Reino Unido, desea “con todo el corazón” que COP28 suponga un “punto crítico de inflexión” hacia una acción transformadora genuina en un momento en el que se están viendo cómo los hitos avisados por los científicos se están alcanzando.
urante su intervención en la sesión inaugural del segmento de alto nivel señaló cómo ha pasado una “gran proporción” de su vida tratando de avisar de las amenazas existenciales que enfrenta el planeta como el calentamiento global o la pérdida de biodiversidad. Si bien, ha reconocido los progresos importantes logrados pero ha mostrado su preocupación por que el mundo se quede atrás.
La Tierra no nos pertenece. Nosotros pertenecemos a la Tierra”, ha recordado el monarca británico en el segundo día de la Cumbre que se prolongará hasta el 12 de diciembre en la que ha defendido que “la acción real es necesaria para ayudar a los impactos crecientes en las víctimas más vulnerables”.
Así, advirtió contra la “indiferencia” hacia el daño ecológico que se ha hecho, porque los récords que se están rompiendo con tanta frecuencia que puede que las personas se estén haciendo “inmunes” a lo que realmente significan.
“Estamos llevando a cabo un vasto y aterrador experimento para cambiar todas las condiciones ecológicas, todas a la vez, a un ritmo que supera con creces la capacidad de la naturaleza para afrontarlas”, ha apostillado Carlos III.
Por su parte, el presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, subrayó la urgente necesidad de hacer más progresos y más rápidamente para proteger a la humanidad. “No tenemos dos planetas Tierra”, ha señalado el mandatario brasileño, cuyo país acogerá en 2025 la COP30.
Sobre la acción de su país, Brasil ha reducido significativamente la deforestación en el Amazonas, y pretende minimizarla a cero en 2030. Brasil es uno de los seis grandes emisores de gases de efecto invernadero del mundo, pero ha puesto en marcha uno de los planes más ambiciosos en materia climática.
Precisamente, el país sudamericano acoge la mayor parte del Amazonas, la mayor selva tropical del planeta, que es hogar de al menos el 10 por ciento de todas las especies conocidas de animales y ha sufrido décadas de amenazas de sequías, contaminación de sus ríos, incendios y deforestación, pero ahora, el Gobierno de Brasil ha puesto en marcha un plan para declarar “cero deforestación” en el enclave.
UNA ENFERMEDAD QUE LOS LÍDERES PUEDEN CURAR
Previamente intervino el secretario general de la ONU, António Guterres, quien definió el cambio climático como una “enfermedad” que “solo” los líderes internacionales “pueden curar”.
El secretario general afirmó que los efectos del cambio climático, como el deshielo de en la Antártida o los hielos de Nepal, los deslizamientos de tierra, las inundaciones o el aumento del nivel del mar son “síntomas de una enfermedad”. “Una enfermedad que solo ustedes, líderes globales pueden curar”, ha manifestado.
En un mensaje positivo, ha defendido que “no es demasiado tarde” y que es posible prevenir el desastre planetario, porque existen las tecnologías para lograrlo y evitar el “peor caos climático” si se actúa ahora.
Sin embargo, frente a ese “caos climático”, ha defendido que la acción climática puede cambiar esta tendencia y que las energías renovables son “buenas” para el planeta, la salud y la economía para afrontar una demanda de energía creciente y conectar a millones de personas a una electricidad asequible. “La energía renovable nunca ha sido más barata”, ha apuntado.
En su intervención, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, animó a que más países se sumen a los mercados del carbono para “unir fuerzas” frente al cambio climático y ha ofrecido la experiencia de la propia Unión Europea para ayudar a otros socios a ponerlos en marcha en el marco de la cita climática internacional.
“Todos lo sabemos: si queremos mantener el calentamiento global por debajo del punto de inflexión de 1,5 grados, tenemos que reducir las emisiones globales. Y hay una forma de hacerlo, al tiempo que se fomenta la innovación y el crecimiento. ¡Poner precio al carbono!”, ha destacado Von der Leyen en el discurso de apertura del acto sobre mercados de carbono.
La líder alemana ha explicado que la tarificación del carbono “empuja al sector privado hacia la innovación”, al tiempo que hace que los grandes contaminadores paguen un precio “justo”, lo que genera unos ingresos que pueden reinvertirse en la lucha contra el cambio climático, en innovación y en una transición justa.
INDIA SE OFRECE PARA ACOGER LA COP33
Mientras, el presidente de India, Narendra Modi, ha ofrecido su país para albergar la COP33 en 2028. El tercer mayor emisor de gases de efecto invernadero, ha reafirmado su objetivo de alcanzar el objetivo de cero emisiones netas en 2070 y ha asegurado que está en el camino para alcanzar un 50 por ciento de energía limpia en esa fecha.
Modi ha hecho un llamamiento a una transición energética “justa, inclusiva e igualitaria” y ha recordado a las decenas de líderes globales actuales que el cambio climático ha sido causado por unos pocos países desarrollados.
“Durante el pasado siglo una pequeña porción de la humanidad ha explotado indiscriminadamente la naturaleza”, ha afeado el presidente de India, quien ha hecho hincapié en que “sin embargo la humanidad entera está pagando este precio, especialmente la gente que vive en el sur global”.